Traetupoliza. Seguros de vida a tu medida para cuidar de los tuyos.
Como todos sabemos, fumar se ha convertido en un hábito que ocasiona muchos y graves problemas graves de salud; por ello, es lógico que te preguntes si es posible protegerte con un seguro de vida para fumadores. Aunque la respuesta rápida es que sí, a continuación, respondemos a todas tus dudas, especialmente sobre el cuestionario de salud… ¡Sigue leyendo!
Primero, debes tener claro que fumar no tiene por qué ser un impedimento para protegerte y contratar un seguro de vida. Sin embargo, es obvio que, si fumas, tu acuerdo de protección acabará teniendo un precio más caro: sí, fumar aumenta el riesgo de muerte prematura y, por lo tanto, a mayor riesgo, las aseguradoras aplicarán primas más altas para asegurarte.
En este sentido, las compañías del sector consideran que los fumadores son personas más propensas a sufrir determinadas enfermedades (como varios tipos de cáncer, hipertensión, enfermedades del corazón, problemas coronarios, dificultades respiratorias…), precisamente, por este hábito. En consecuencia, ten muy claro que tu póliza de vida se encarecerá por fumar.
No obstante, las empresas aseguradoras establecen diferentes parámetros en función del consumo de nicotina del asegurado, sea cual sea su formato (cigarrillos, tabaco de liar, parches y/o chicles de nicotina…). Además, hay que tener en cuenta que haber dejado de fumar no implica que la prima sea más barata. De hecho, hay aseguradoras que consideran que una persona es un usuario de nicotina incluso si han pasado cinco años desde la última vez que la consumió. Todo esto será comprobado previamente, pues las compañías confirmarán tus hábitos de salud a través de un examen médico, aunque no todas las pólizas lo requieren.
Para que entiendas cómo se aplica la sobreprima, necesitas algunas consideraciones sobre quién es fumador en el sector. Para empezar, resulta que, si consumes menos de un cigarro al mes, muchas aseguradoras no te definirán como fumador y podrás calificar para las mejores tarifas de seguro de vida. Así, la hora de conocer tus hábitos como fumador, las compañías te preguntarán sobre el uso que haces de los productos con nicotina. Como tal, cuando hagas la solicitud a tu póliza, su consumo determinará el riesgo para tu protección y, considerando el tabaco y los cigarros como los productos base sobre el que se especifica la prima si eres fumador, el resto de los artículos con nicotina serán estipulados con tratamiento diferente:
Según el producto de nicotina… | Así lo consideran las aseguradoras |
Tabaco para fumar | Fumar tabaco encarecerá tu protección |
Tabaco de mascar | Se tratará como el tabaco fumado |
Puros y pipas | Las tarifas se aplicarán igualmente, aunque de ello dependerán varios criterios |
Chicles y parches de nicotina | Su tratamiento variará entre compañías |
Cigarrillos electrónicos | Si no especificas que son electrónicos, la aseguradora considerará que fumas cigarrillos tradicionales |
En el sector de los seguros de vida, generalmente, será un producto tratado como el tabaco que se fuma. Y, entonces, la frecuencia con la que se mastique afectará al coste de la póliza. Sin embargo, las compañías no podrán distinguir entre masticar tabaco y fumarlo, ni con un análisis de sangre. Por ello, en caso de que la aseguradora sea más indulgente con los consumidores del formato masticado, te recomendamos que lo especifiques al llevar a cabo tu solicitud.
Quienes fuman en pipa, por lo general y muy probablemente, recibirán tarifas de vida calculadas según los criterios aplicados para los fumadores. Sus precios se encarecerán si consumen más de una vez al mes, si la prueba resulta positiva en nicotina y si usa cualquier otro producto.
Si el asegurado usa chicles o parchas de nicotina, esto se reflejará en un examen de sangre u orina, por lo que es importante revelar su uso en la solicitud. Esto es así porque algunas compañías de seguros tratan estos productos de la misma manera que los cigarrillos, mientras que otras lo consideración como no fumador. Nuestro consejo es que lo aclares, así como el tiempo que ha pasado desde que fumaste por última vez, ya que esto determinará la calificación.
Las compañías de seguros, generalmente, consideran los cigarrillos electrónicos como una forma más de fumar, lo que implica que también aplicarán con primas para fumadores. Por ello, también deberás especificar que los usas en tu solicitud, pues no todas las aseguradoras los consideran de la misma manera. Si no lo haces, la entidad asumirá que eres fumador de tabaco.
Evidentemente, mentir no es buena idea, pero lo es mucho menos si pretendes hacerlo al contratar tu seguro de vida. Al tratarse de tu proceso de solicitud, deberás ser honesto sobre tus hábitos de consumo con el tabaco, pues esta es la única manera de completar tu contrato. Y lo mejor es decir la verdad, pues la nicotina es fácil de detectar en los exámenes médicos.
De hecho, si mientes a la compañía sobre tu hábito fumador, esta puede denegar la posterior reclamación por fallecimiento de los beneficiarios si tu aseguradora comprueba que eras fumador cuando pensaban que no. Por eso, desde Traetupóliza, creemos que los más recomendable será acabar pagando un poco más. Para determinar con exactitud el precio de tu protección, las compañías pueden, incluso, usar análisis de saliva, orina o sangre para determinar si hay nicotina o cotinina en tu sistema. Estos pueden detectarse si has usado alguno de los productos de tabaco, pero no si solo has estado expuesto al humo como fumador pasivo.
En este trámite, son muchos los que tratan de ocultar su consumo con métodos más o menos eficaces como comer chicle, tomar mucha agua, eliminar el olor de la ropa o, simplemente, esperar unos meses a que el efecto de la nicotina desaparezca de nuestro cuerpo. Sin embargo, te confirmamos que las entidades aseguradoras pueden llegar a utilizar técnicas muy precisas para evitar que un posible asegurado pueda esconder su condición de fumador. Como conclusión, ten en cuenta que, si eres fumador y quieres ocultarlo, lo vas a tener difícil.
Creo que no necesitamos recordártelo, pero, aunque dejar de fumar no abaratará la póliza de tu seguro de vida de un día para otro, sí mejorará notablemente tanto tu calidad de vida como la de los que te rodean. Y es que, al final, te evitará muchos problemas de salud y, además, supondrá un ahorro en tu bolsillo, algo que nunca viene mal. Sin embargo, ¿estás dispuesto a dejar de fumar? Este es el primer paso para lograrlo, ser consciente de lo que te has propuesto.
En este sentido, algo que te ayudará a dejar este hábito (o vicio) y a superar el síndrome de abstinencia es hacer ejercicio. Esto lo avalan muchos especialistas, pues el ejercicio ayuda a lidiar con la adicción a la nicotina, tanto en los aspectos físicos como en los psicológicos. También ayuda a limitar el aumento de peso, algo muy habitual cuando se deja de fumar. Si crees que puedes dejarlo y así quieres intentarlo antes de contratar tu seguro, ¡nosotros te esperamos! Y estaremos encantados de atenderte en tu protección cuando lo necesites.